Titular del partido: "Mía".
Hacía mucho que no perdíamos por un gol de diferencia así que para que no se nos olvidara caimos 5-4. La verdad que no jugamos mal partido viendo el plantel que había con 6 o 7 mamaos entre los 8 jugadores disponibles. Empezamos bien ganando 2-0 (estreno goleador de DJ impulsado por Pablo) pero al filo del descanso nos metieron uno y empezamos la segunda parte con la caraja de costumbre. Minuto 2 de la 2ª parte perdíamos 3-2. En ese momento decidí que había que hacer algo notable en el partido. El árbitro (retrasado mental, no sabía ni contar los minutos del descanso como bien apuntó César) pitó una falta a favor del rival en su propia área. Me adelanté ligeramente para salir a atajarlo porque se me lleva instando a ello 4 jornadas, con tan buena suerte que al retroceder no llegué al balón que se coló en mi meta. El chiste que os hartaréis de oir consiste en que en tal proceso se me ocurrió gritar "MIA" y mia fue (la cagada). 4-2. En un alarde de valentía redujimos distancias 4-3 pero para redondear mi tarde de gloria marcaron en el posterior saque de centro. Luchamos hasta el final pero no pudo ser.
Calificaciones:
- Jose: 0. Ver párrafo anterior. Alguna salida a lo loco en corners o faltas. Me iba mejor jugando al padel. Conste que en la primera parte lo hice bien.
- Ángel. 2. Bien con la hoz. Buenos pases de 40 metres.
- DJ. 2. Estreno goleador en un alarde de brega. Seguro atrás como siempre.
- Víctor. 2. Férreo en la marca excepto en el gol de tacón (como oís, nos marcaron uno de tacón). Buenas incorporaciones al ataque.
- Javi. 3. Se llevó palos a mansalva. Distribuyó con criterio y creó peligro.
- Zejas. 2. A pesar de su lesión jugó un buen partido. Dejo que él mismo comente su lanzamiento de falta al borde del área.
- Alex. 1. Todavía estaba mamao. Brega sin recompensa una vez más.
- Pablo. 2. Suma y sigue, 2 golitos más a su cuenta.
Añadir también que el árbitro obvió un gol "fantasma" del equipo rival en un corner. Remataron de cabeza y fui a sacar el balón a 2 por hora porque estaba ya un metro dentro de la portería. Lo despejé con desánimo para sacar de centro cuanto antes cuando para sorpresa del personal el trencilla no lo concedió diciéndole a un rival: "desde aquí lo veo perfecto (frontal del área) y no ha entrado". Entró metro y medio u más pero siguió el juego.